Discos Críticas

Jack White, el geniecillo de Detroit, siempre tiene que soportar las criticas más voraces, las del desprestigio y el ninguneo. Seguramente tiene tantos seguidores como detractores, y al parecer ambos se lo toman muy en serio. Guste más o menos se tiene que reconocer que lo realizado por el señor White bajo el nombre de The White Stripes tuvo su importancia al inicio de los dosmiles, prácticamente una década, lo que va de 1999 a 2008 donde Jack nos regaló grandes discos y canciones, reviviendo el blues, dándonos rocanrol ya sea zeppeliano o no bajo una estética impagable. Grandes discos, al menos 4, un póker formado por “De Stijl”, “White Blood Cells”, “Elephant” y “Get Behind me Satan”. Claro que todo lo que digo de bueno es utilizado en su contra. Que si la estética modernita era para despistar de su poca calidad, que si copiaba a LedZep descaradamente, que si era un bluff, un hype o un aquí te pillo aquí te mato. No lo sé, pero su fórmula funcionaba como la seda hasta que él mismo vió que estaba encorsetado y que tendría que salir de esa espiral envenenada, que quería más cosas pero que bajo esa vestimenta no podría hacer lo que tenía en mente. Así pues, el grupo se rompe y Jack se convierte en Hidra de Lerna, el monstruo acuático de mil cabezas, le cortas una y salen dos más. Su actividad se multiplica y sus proyectos también, además, ahora está más aún en la prensa ya sea la amarilla o no. Productor de leyendas, integrante de supergrupos como The Raconteurs y extrañas ideas y/o proyectos, algunos de ellos fallidos como es en mi opinión la banda The Dead Weather. Todo para acabar haciendo lo que todo el mundo sabría que pasaría. Sí, después de vueltas y vueltas, Jack White firmó con “Blunderbuss” su primer disco en solitario donde daba rienda suelta a su facilidad para tocar diferentes estilos pero acercándose más que nunca al punto donde había dejado a los White Stripes.
Blunderbuss” estaba francamente bien. Era muy variado, tal vez demasiado, pero contenía un buen puñado de grandes canciones. El disco gustó mucho a sus seguidores y dejó más fríos que el hielo a sus detractores. Cuando este año White anuncia nuevo disco en solitario todos se frotan las manos, unos se congratulan por ello y otros preparan el machete cubano más aún cuando White reconoce que le costó mucho poner letra a las canciones y que tiró de poemas y escritos antiguos para darle cuerpo a la música. Llegó el adelanto, y la instrumental “High Ball Stepper” fue un balonazo en todos los huevos a los enemigos del señor White. Tremebundo tema. Acojonante. Zas! en toda la boca! Y tocó esperar. Y esperamos, y llegó el disco, llegó “Lazaretto”. Vamos pues con él.
 
 
El disco comienza como un cohete con “Three Women”. El tema es un blues-rock de toda la vida vestido para la ocasión con ropajes negroides de New Orleans, riffs de guitarra ardientes y un teclado de esos que carga el diablo. La autoría de la canción la comparten Jack White y Blind Willie McTell. Tremendo inicio: “Lordy Lord. Lordy Lord. Lordy lordy lordy Lord!”. Llega sin casi dejarnos tomar aire la canción que da nombre al disco. Un temazo que ni os cuento. “Lazaretto” tiene un semirapeado mezclado con rock marca de la casa. Jack trabaja duro, como en madera y yeso, madera y yeso… El tema es de alucine con un riff central épico y como digo ese semirapeado.. “Born rottin’, bored rotten”... No me la quito de la cabeza. Fantástica. “Temporary Ground” nos lleva a sonidos más tradicionales, más clásicos donde hasta encontramos un maravilloso violín, recuerda muy mucho, tal vez demasiado, a esos finales que nos dejaban boquiabiertos en los discos de The White Stripes, aquí también canta una fémina, la violinista Ruby Amarfu. “Would you fight for my love?” es mi favorita del disco. Intro demencial, que te deja empalmado total. Cuando el estribillo te explota en la cara sabes que estás ante algo descomunal, joder con los riffs de guitarra y como canta la Ruby! Vale que ese final es muy Crazy Horse, muy Neilyounguero, pero coño, no nos vamos a poner a discutir a estas alturas, lo que importa es que el tema es un temazo. Llega el tema instrumental, sí, el tema de adelanto, llega “High Ball Stepper” que a mí me parece acojonante. No diré más. Otro de los temas del disco es sin duda “Just one drink” con un inicio muy Velvet como homenajeando a Lou, pero también rememorando sonidos rocanroleros clásicos como los de Buddy Holly y ese piano desbocado que parece tocado por Nicky Hopkins en el Exilo de Main Street.
“Alone in my home” es un caramelito, una de las canciones de este 2014, con esa melodía preciosa y ese pianito de juguete, ese Jack dándolo todo vocalmente cuando él sabe que va muy justito. Es curioso que Jack White siendo un excelente guitarrista encuentre al piano la esencia de sus canciones, éstas mejoran cuando él aparece y están llenas de sentimiento y verdad. Lo que no suele gustar de los discos de White es que son demasiado variados., por ejemplo el country de “Entitlement” a mi me chifla pero entiendo que a algunos les parezca un bajón, aunque sí, es un tema demasiado manido. “The Black Bat Liquorice” engancha de lujo con “Lazaretto”, de la misma guisa que aquel y que los temas que abundaban en los discos de The White Stripes, podría estar sin duda en cualquiera de ellos. A mí me parece un gran tema. Y ojo! Que llega otra de las canciones del disco, llega “ I Think I Found The Culprit” claro que aquí está otra vez el pianito y una acústica que enamora y se hace la interesante. Cancionaca vamos, diferente, absorvente y mágica. Cierra el disco “Want an Able” que podría pasar por una especie de nana vaquera, una pequeña joya que nos deja un gran sabor de boca.

Es “Lazaretto” mejor álbum que “Blunderbuss”? En mi opinión sí. Un sí rotundo. Es menos disperso, más corto en duración, con más genio y temperamento. Con mejores canciones? Pues sí, así lo creo, ya veis que opino diferente que la mayoría de terrícolas. Creo que White está encontrando el equilibrio de The White Stripes y sus otros proyectos, a él que es un genio le podemos pedir más y mejor, claro, pero este “Lazaretto” es una delicia, muchos querrían facturar algo con este nivelazo. Desde luego con Jack White no hacen falta milagros como con Lázaro, con él sobran las palabras, más aún la coletilla de «levántate y anda».

Jack White – “Lazaretto” (2014)
8,9/10
01.– Three Women/ 02.– Lazaretto/ 03.– Temporary Ground/ 04.– Would You Fight For My Love/ 05.– High Ball Stepper/ 06.– Just One Drink/ 07.– Alone In My Home/ 08.– Entitlement/ 09.– That Black Bat Licorice/ 10.– I Think I Found The Culprit/ 11.– Want And Able

*post aparecido originalmente en Nikochan Island por Nikochan


3 comentarios

  1. Bueno, ya sabéis más o menos mi opinión al respecto, además de la reseña que escribí en su día tiene detalles muy similares a la tuya, especialmente en el primer párrafo que ahora lo releo y hasta creo que me sirvió de inspiración, my King. No encuentro una explicación lógica a las críticas negativas más despiadadas, cuando las leo tengo la sensación de que los que amamos el rock como alimento del espíritu no navegamos en el mismo barco, prefiero destinar mis críticas más feroces a todos esos productos que copan las listas de éxitos, que son carnaza popular de festivales y que aportan poco o cero patatero a la causa. Otra cosa es que guste más, menos o nada, ahí lo entiendo todo. Es verdad eso que dices de que cada argumento que podría ser objeto de admiración es utilizado en su contra por los mismos motivos tal y como comprobé buceando en la red cuando se publicó, aunque bueno, eso ha sido típico en la historia empezando por la British Invasión o los mismísimos Zeppelin. Considero que los ramalazos de funk-punk son los que acentúan más la dificultad de comulgar a nivel general, un poco lo que le pasaba a los Red Hot.

    En cuanto al disco me parece mejor y mucho más compacto que el Blunderbuss que a partir de su ecuador me daba la sensación de que perdía fuelle y se me hacía empalagoso. El Lazaretto dista de ser mi disco del año, hay entre 10 o 12 artefactos que me hacen más tilín hasta el momento de un buen año musical (de los mejores últimamente) en cantidad, pero me parece un gran disco, lejano a las magnas de White Stripes pero buen disco al fin y al cabo, quizás el más rompedor del 2014 y el que tiene una producción más elaborada, y eso tiene mérito. Abrazo, crack.

  2. Pues para mi sin duda, el número 1 de 2014 y de ahí no me baja nadie. Discazo, con temazos espectaculares, himnos en algunos momentos, una cuidadísima producción, una banda que lo borda (el batería y la del violín son caso aparte) y Mr.White en estado de gracia.
    Me la pela 300.000 lo que se diga en su contra, ojalá se metiesen más con gente que no es nada y tienen atontadas a niñas de 15 años con una cultura musical deficiente.
    En fin, glorioso disco.

    Abrazos truferos.

  3. Uno en los que quiero detenerme si o si, pese al vaguerío que me traigo con las novedades, pero es que el sr.White trabaja y piensa muy bien. A veces da la sensación en el mundo de la música en general que las cosas se opinan demasiado a la ligera y sin mucho escuchar, se sigue una corriente y punto. Pero es que hay que fijarse en los detalles, en la grabación, en la producción, y por lo poco que he escuchado en las canciones. Ya lo decían Led Zeppelin: the song remains the same, quien a estas alturas quiera ir de original como su mayor baza solo quiere costearse un viaje a la costa como parte de un cartel. Lo escucharé con detenimiento. De acuerdo con todo. Saludos

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