Havoc - Espíritu

Críticas Discos

Havoc inaugura el año con su nuevo disco: ‘Espíritu’.

En esta ocasión, el sonido se muestra menos barroco, menos victoriano, para sentirse más realista y compacto, más oscuro y crudo.

Me alegra que la primera reseña de un disco de 2020 para el Exile venga dedicada a un grupo de aquí, que canta en español y que no cuenta con la bendición de los grandes vehículos mediáticos como protectores de una causa mitad artística, mitad industrial.  

Havoc presenta su nuevo disco, «Espíritu», demostrando que para ellos si es aplicable el tantas veces manido y especulativo termino de ‘independiente’.  

Nuevamente auspiciados por el sello «Subterfuge Records«, la banda guipuzcoana despliega un ramillete de canciones que si bien se muestran claramente representativas del sonido Havoc, no es menos cierto que exhalan la voluntad de crecimiento y rotación sobre su eje seminal que caracteriza a las bandas con instinto y voluntad de evolucionar.  

De nuevo destaca la inquieta y adecuada producción del guitarrista del grupo, Jon Vidaur. En esta ocasión, el sonido se muestra menos barroco, menos victoriano, para sentirse más realista y compacto, más oscuro y crudo.  

Las guitarras de Jon y Xabi Villena suenan más fibrosas y aguerridas, con más músculo que en «Amado líder»; mientras que la base rítmica se impone incisiva y en momentos frenética, gracias al buen hacer de Mikel Alonso al bajo y a la intrépida batería de Andoni Etxebeste.  

Havoc
Havoc

Por su parte Pedro Gracia Pérez de Viñaspre interpreta sus composiciones con ese timbre terso y flexible de siempre, pero en esta ocasión de expande por medio de un fraseo más verista y regio. Todo esto que apunto, no hace, insisto, en modo alguno irreconocible la oferta de Havoc, simplemente se trata de una nueva y más hosca mirada a su propuesta, sin perder de vista el pop de guitarras con ramalazos rock de incendiarios riffs que acostumbran a practicar.

Esto ya se intuía cuando hace varias semanas nos ofrecían el primer single de adelanto: «Y si tiembla en suelo».

A este siguieron la iridiscente y soberbia «El agravio mundial», una favorita personal donde se funden las diferentes caras del poliedro sónico del grupo; y el reciente single, «Televisiones», de tendencia más pop y dotada de un estribillo irresistible.

Pero todo el tracklist es homogéneo y equilibrado, no muestra partes de relleno y los diferentes matices que se esparcen por su metraje hacen de su escucha un ejercicio de disfrute y satisfacción plena.  

Merecen mucha atención temas como la explosiva y confesional «Llagas» o la inquietante «Perros».»Doble cuerpo»«Los errores» o «Todavía» mantienen el alto nivel apuntado hasta ahora sin turbulencias de ningún tipo, dentro de una gama estilística que llega incluso al punk en la segunda citada.  

Con «El pop murió» nos encontramos con los Havoc de su precedente y estupendo «Amado líder» y «!Solo tú, salvaje!» es una personal epístola con acompañamiento de guitarra que contrasta con la controversia sónica de «Juntando los vientres».  

Con el bonus track de una nueva visión de «Todavía» acompañados de Mikel Erentxun termina este excelente disco.   Havoc siguen diferenciándose dentro del panorama independiente de este país, su proposición es identificable, directa y de calidad, además rota y se expande, lo que les hace aún más atractivos, creo que es un inmejorable comienzo para este 2020 que acaba de comenzar.

Latest posts by Jorge García (see all)


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos que te pueden interesar