Discos Críticas

…arremete contra todo lo que encuentra a su paso sin dejar espacio a la esperanza, una banda sonora noise que entre medios tiempos, melodías con estribillos coreables y rock guitarrero adictivo demanda que pongas el volumen al máximo pues va a ser la mejor banda sonora que vas a encontrar ahora mismo para el fin de los días que ya ha empezado…

Estaba leyendo la entrevista a un grupo popular en el mundillo musical más selecto que me ha llamado poderosamente la atención. Argumentaban algo así como que cada vez les resultaba mucho más difícil que la realidad no se filtrara en sus canciones (WTF!!!??). Me ha pillado mientras acababa de resolver este crucigrama que hoy presento. Una combinación que casi me ha llevado a cortarme las venas o tirarme por el balcón. Pero lejos de querer menospreciar tal argumento, incluso a un grupo que me gusta y que no viene a cuento todo sea dicho, me ha llevado a una reflexión personal que quería compartir aprovechando el medio. Y es que considero que hay muchas maneras de vivir la música y tenerla en el centro de nuestras vidas. Todas valen y son respetables, ya bastante hacemos para que la música de calidad no se pierda en este mar de mediocridad en el que vivimos. Puede llevarte entre dos extremos: alienarte totalmente de la realidad entre cantos hedonistas y/o encerrados como ostras como si no pasara nada; o bien agarrados a una guitarra como un medio de purga de toda la mierda que tenemos que tragar en el día a día, desde las relaciones personales, pasando por las rrss, la situación laboral, social… Por mi parte cada vez conecto más con esta segunda vía menos complaciente y veo mucho más lógico cogerse al nihilismo como modo de subsistencia para no volverse loco, incluso al humor cuanto más negro mejor. Así que la publicación hoy en día de un disco como este Punch Me, Kiss Me, Fuck You me parece un milagro, o más bien tal y como está el panorama debería ser la tendencia. Para más señas hablo del tercer disco de nuevas canciones de Mad Robot, cuarto si contamos las versiones acústicas de Pig, y quinto si consideramos el miniLP Superfruit como uno de los momentos destacados en la carrera musical de Mike Grau. Un grupo favorito al que seguimos la pista desde hace años en esta casa.

Desde su debut con Blacklisted su actitud ha sido transitar por una via secundaria al panorama festivo y lisonjero de la actualidad musical a base de hacer sonar las guitarras lo más fuerte posible sin perder el toque pop. Con Punch Me, Kiss Me, Fuck You consolidan esa manera de entender la música, pasando por el proceso de grabación y distribución, filosofía DIY, y hasta la misma esencia de sus letras incómodas y abrasivas. En cuanto a su estilo no encontrarás en este disco un giro inesperado, de la misma manera que tampoco encontrarás autocomplacencia, ni adocenamiento alguno. Lo que si puedes encontrar es mucha coherencia pues continúa aquí el rock alternativo de los 90 que ya forma parte de su adn con las influencias fundamentales de Weezer, Nirvana, Sonic Youth, REM, Pavement y Pixies, y a su vez se alinean con grupos más actuales del indie rock americano no muy conocidos por estos lares como Metz, Car Seat Headrest, Martha, Could Nothings (entre muchos otros), cosa que hace que la propuesta musical del ex-Furious Planet no se estanque y continue en movimiento, a su ritmo y bien fundamentado.

Esta vez el tono se recrudece considerablemente pues contiene algunos de los momentos más duros a nivel guitarrero y algunos de los versos más oscuros de la historia de la formación, demoledores y catárticos y sin perder el gancho pop, en Beach Funeral se apropian de nuevo de la fórmula calma-tempestad, y de las disonancias melódicas al servicio del estribillo perfecto en She’s Not Breathing. El componente personal es el guión fundamental sobre el que se desarrolla el disco que entre visiones apocalípticas como Horrible Day demuestran de nuevo que lo ‘políticamente correcto’ no es su territorio. Las guitarras se desmadran en Culturcide y aparece la crítica social en la fenomenal Time Traveler. No pueden faltar los habitualess hits que suelen tener sus discos, Everything Sucks es una de esas gemas perfectas de pop pegadizo esta vez con el punto de mira puesto en las rrss, tal y como es inevitable que no se filtre la absurdidad y la burbuja de los perfiles digitales como en Poser que carga contra la impostura que existe en el mundillo musical.

Letras que en pocos versos son capaces de sintetizar un sentimiento desolador como es el caso de los medios tiempos Personal Tragedy y Punch Me, Kiss Me, Fuck You. Incompresible que no existan más canciones como Shit Present que es lo más cerca que podremos estar del punk-rock al igual que de la conciencia de clase trabajadora, todo un himno hiperrealista al desencanto y a la angustia existencial. Las confabulaciones escapistas de serie z encaran la recta final en Five Dimension Space situándonos en una actualidad que demanda como el comer una invasión o una catástrofe de dimensiones bíblicas, con estas ideas recurrentes propias del ideario robotiano se despiden en Doomsday Asteroid, el gran meteorito que acabará con todo de golpe, tal y como una catarsis existencial pudiera reiniciarnos de nuevo desde cero.

La evolución en su sonido y en la producción es evidente, algo que ya se denotaba en I Declare War, aparentemente profesional en su acabado y que no es tal pues todas las tomas y mezclas nacen mayormente en la habitación de Mike Grau. Puro DIY con un resultado excelente. Apuntar que la banda queda en cuarteto con la salida de Susana Munárriz que aún llega a aportar su voz en este disco. En los directos será Carolina Otero (Lil’Knife), que ya formaba parte de la banda como segunda guitarra, quien a partir de ahora se encargará de la parte vocal junto a Grau. Un cambio a la vez natural si tenemos en cuenta que ambos ya han trabajado juntos tanto en Superfruit, disco que hicieron los dos a duo el año pasado, como en sus bandas respectivas.

Con esta colección de canciones Mike Grau crece como uno de los francotiradores más despiertos de la actualidad del rock independiente. Con el telón de fondo de una ruptura arremete contra todo lo que encuentra a su paso sin dejar espacio a la esperanza, una banda sonora noise que entre medios tiempos, melodías con estribillos coreables y rock guitarrero adictivo demanda que pongas el volumen al máximo pues va a ser la mejor banda sonora que vas a encontrar ahora mismo para el fin de los días que ya ha empezado. Mad Robot abren así una nueva etapa que a tenor del buen momento compositivo y la brutalidad del resultado, estoy seguro que nos regalará en un futuro muchas más referencias discográficas de nivel. Un disco tan recomendable como necesario.

Por Chals Roig

Este disco vale la pena y las copias en cd están volando.
En su bandcamp podéis adquirirlo.
https://madrobot.bandcamp.com/album/punch-me-kiss-me-fuck-you


2 comentarios

  1. Esperare unos días para lanzar mi reseña, creo que entroncará perfectamente con esta, es su disco más malote, por usar un término poco apocalíptico (que no son horas) y desde luego tan bueno como los precedentes.
    Estupenda reseña con un primer párrafo antológico colega.
    Abrazos.

    1. Gracias Jorge. Desde el respeto lo digo que ese ignorar la realidad que nos rodea en la mayor parte del mundillo musical me puede. Yo no tengo talento para hacer música, pero si fuera el caso no podría evitar que la realidad fuera la mayor parte de mi inspiración, hay donde elegir. El grupo en cuestión era Tindersticks, un grupo que por cierto me gusta mucho. El disco de Mad Robot es brutal, de hacer la ola.
      Saludos y abrazos.

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