Discos Críticas

El dúo de Akron, Ohio, formado por Patrick Carney y el talentoso Dan Auerbach, tocaron seguramente techo con «Brothers» (2010) y «El camino» (2011), consiguiendo una buena mezcla de su bluesrockerismo con toques de garage y el mainstream que les haría ganar pasta y reconocimiento, y sí, ambas cosas se dieron por igual convirtiendo a The Black Keys en unos músicos millonarios que creían poder hacer lo que les diese la realísima gana, y después de discos en solitario, proyectos paralelos y tareas de producción de Auerbach, en 2014 dieron luz a su siguiente disco, su «Turn Blue» (2014), que a un servidor le pareció un error descomunal: aburrido, soporífero y lleno de tics repetitivos y modernidades que no les pegan nada a las teclas negras. Parecía que era su último disco, su punto y final, pero no, era un punto y aparte, creo que por lo de mejor juntos que por separado, mejor juntos, más pasta. Así pues, este mismo año justo antes del verano apareció «Let’s Rock», y un servidor le ha estado dando varias escuchas durante el verano, sin engatusarme del todo pero con buenos momentos, claro está, puesto mancos no se han quedado. Se olvidan de las producciones de Danger Mouse que tanto les dio, para bien y para mal, y todas sus lecciones bien aprendidas las ponen en marcha en favor de la nueva docena de canciones que ellos mismos se ocupan de producir. Sin rompernos mucho la cabeza en analizar el disco vemos un intento claro de remontar el vuelo y de volver a ser ellos mismos aunque realmente ni ellos saben quienes son ni mucho menos que quieren ser puesto que las canciones son un gran muestrario de lo que han ido haciendo estos últimos años. No es un disco que quite el hipo, ni que de primeras te vuelva tarumba. No es el disco perfecto pero sí es un buen disco, que mejora con las escuchas pero que sinceramente uno olvidará pronto, no creo que dentro de unos años uno se ponga delante de su colección de discos, decida ponerse algo de los Black Keys y elija éste. Lo dudo. Yo no creo que lo haga, antes iré por otros, aunque se están volviendo una banda de compilación descaradamente, un «greatest hits» de este dueto sí es una buena elección y eso que no soy muy partidario de este tipo de discos aunque para largos viajes por carretera son un valor seguro. Vamos pues con «Let’s Rock» que si bien no será eterno, sí me ha dado buenos momentos este veranito.

Empiezan pronto los Black Keys a torcernos el morro con el descarado AOR de «Shine a little light» que no aporta nada a su discografía. A un servidor le parece un pastel descomunal con reminiscencias radiofónicas de final de los setenta y principio de los ochenta. Faltan las hombreras y el tejano doblado hacia afuera. Curioso que en casi todas las webs musicales colocan el tema como uno de los mejores… pero no, que no os engañen! «Eagle Birds» tiene ese ritmo trotón ya visitado por Carney y Auerbach. Easy rock, pegadizo, molón y poco más. Correcta. «Lo/Hi» es uno de los singles, y se nota. Un tema chulillo que hará creer a adolescentes que han encontrado el rocanrol molón que salvará sus atormentadas vidas pero que no deja de ser una versión descafeinada de mil y una bandas que todos hemos escuchado en mil y una ocasiones, antes y mejor. El sonido setentero con reminiscencias lennonianas aparece en «Walk across the water» que me gusta por aventurarse un algo o simplemente por cambiar un poco el tercio pero desde luego tampoco es que sea la repanocha…. «Tell me Lies» y «Every littel thing» nos llevan al ecuador del disco, la primera me gusta porque cabría en «Brothers» y la segunda me gusta todavía más por volver a picar en ese blues eléctrico con cierta acidez pero desde luego con medio disco devorado cabe destacar que si bien no es un mal disco todo suena remendado, ya escuchado, reciclado… y así, lo será todo el disco. «Get yourself together» creo que es el tema que se engancha con mayor facilidad, tiene las señas características de la banda, y el ritmo de «lonely boy» pero más pausado, los mismos coros de «El camino»… bueno, parece una sobra de aquel disco. «Sit around and miss you» vuelve al sonido sixtie con esa beatlesque que a todos gusta mientras que «Go», que huele a single, parece salir del cajón de canciones perdidas de Beck… no está mal, gusta pero no mata, y ese es el eslogan del disco sin duda. Me gusta bastante «Breaking down» y con «Under the gun» ya se repiten en exceso. Cierran correctamente con «Fire walk with you» rememorando a los Cream, a un Clapton puesto de diazepam porque le falta algo de fuerza a la canción, como a todo el disco. Le falta verdad, le falta valentía, le falta arriesgar y no ser autocomplaciente. Como digo un disco de agradable escucha, sonidos familiares y buenos músicos que no está mal pero no mata.

The Black Keys – Let’s Rock (2019)

01.- Shine A Little Light/ 02.- Eagle Birds/ 03.- LoHi/ 04.- Walk Across The Water/ 05.- Tell Me Lies/ 06.- Every Little Thing/ 07.- Get Yourself Together/ 08.- Sit Around And Miss You/ 09.- Go/ 10.- Breaking Down/ 11.- Under The Gun/ 12.- Fire Walk With Me.

*Post aparecido originalmente en Nikochan Island por Nikochan


Un comentario

  1. NO le he dado mucha cancha, lo he escuchado unas pocas veces y no me ha dicho gran cosa. No siempre creo en lo de las escuchas, y a este no se las doy, aunque mejora el anterior claramente (tampoco era difícil).
    Abrazos.

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