Críticas Discos

Llevaba mucho tiempo queriendo reseñar y divulgar como merece una obra maestra del cambio de siglo que pasó y pasará para siempre desapercibida, olvidada y disfrutada solamente por un club de selectos melómanos románticos. Aquellos que preferimos el country-soul y a The Band ante todas las demás propuestas aunque también nos apasionen.
 
Es una pena que no se conozca porque es un disco magno, su disco, donde tuvieron la oportunidad sobre la mesa y bien que la aprovecharon pero el glorioso resultado, aunque cosechó buenas críticas, no tuvo éxito comercial. En eso me recuerda mucho al Odyssey & Oracle… al tiempo.
 
Me comentaba Danny Wilson en Londres, antes del concierto de Graham Parker con sus Rumour, que fue un disco donde lo dieron todo y perdieron mucha vida, su hermano Julian, la otra media naranja de este combo de south-londoners australianos, se fue a vivir un periodo a París tras la grabación, antes de la publicación y le volvió loco con las mezclas finales y decisiones de edición. Se nota el perfeccionismo y la tensión en todos sus surcos. Detrás de cada cosa bella, como dice His Bobness, hay algún tipo de dolor.
 
Y no me extraña nada ya que es toda una sinfonía de reinvención de los sonidos tradicionales del rock más dylaniano mezclado con los toques del country soul más clásicos pero con un toque de psicodelia suave y muy Love y como tal una mezcla muy complicada de elaborar sin que te salgan los colores.
 
Comienza con un órgano de iglesia que impresiona para enlazarlo en segundos con unos arpegios de guitarra y una armónica muy Nilssoniana. Wheels es una delicia que podría estar en el Puente Sobre Aguas Turbulentas de Simon & Garfunkel y los hermanos armonizan como si fueran unos Louris/Olson de este lado del Atlántico.
 
Pronto nos damos cuenta de que estamos ante un clásico. 
 
Ladder To The Stars, que fue single, fallido claro, entra en terrenos de mandolinas y melodías irresistibles, y todo suena en su sitio, los Wilson aman a Bruce Springsteen, dato importante. Estamos ante algo tan bello y reflexivo como Point Blank o cualquier cosa del Wildflowers de Petty pero con el característico toque Grand Drive.
 
Sleepy tiene ese piano eléctrico Spooner y los acordes de una recopilación del sello Kent de country-soul pero con unas letras que nos hablan de los barrios del sur de Londres y los corazones rotos que por allí vagan. Gustó tanto a Dan Penn que estuvo a punto de grabar un tema con ellos en el siguiente disco. Danny me dijo que al final no pudo materializarse el sueño de fan.
 
Allí donde se encuentra el Blonde on Blonde con Eddie Hinton o el propio Joe South que ya tocó en el celebre primer disco doble de Dylan pero todo más Brian Wilson si cabe es donde podemos situar el segundo disco de esta encantadora banda.
 
La sección de vientos es tan dulce que cuando la escucho me parece tan perfectamente empastada como el primer día. En serio, es una obra maestra…
 
Algo parecido a lo que consiguieron Mercury Rev en su Deserter´s Songs, tres años antes, disco esencial de final de siglo. Se percibe su influencia en la hermosa y orquestada The Guy Who Would Carry On: no hace falta mucho para imaginarla cantada por San Richard Manuel en el Music From Big Pink. Todo encajaba para que esta banda inglesa entrara en la lista de mis favoritas.
 
True Love & High Adventure es una de las gemas de este monumento a la armonía por su aire más country-rock y su trote ligero. Está tan bien cantada y tocada…
A veces también me da por relacionarles con los Beach Boys del Surf´s Up o el Holland.
 
Un aire más comprimido y lúgrube campa por Nobody´s Song In Particular, canción que va reptando nocturna y reflexiva y que demuestra que ellos ya hicieron lo que los War On Drugs pero antes y con mucho más arte, asimilar el pasado para darle otro aire.
 
A Little Numb es pura balada brit-pop de la época en donde fueron,  con mucha diferencia,  la banda más ninguneada pero la más melódica y, sobre todo la que más trabajaba los arreglos.
 
Luego My Best Side es un lucimiento de las harmony vocals caracteristicas de los ángeles Wilson ( Julian tiene la voz algo más grave) y vuelven a los cambios de la Big Pink; acordarse de The Band en la época de finales de los noventa y no en la british invasion y las bandas mods era toda una heroicidad en la Pérfida Albión.
La única pega es que es de un patrón muy similar a Sleepy pero no le veo mucho inconveniente.
 
La novena y última canción de un disco con cortes minutaje generoso que no larguísimo, de ahí lo exclusivo de este trabajo dentro de su propia discografía más concreta, es la espectacular One Last Parade que tras una intro circense se adentra en territorios otra vez de Simon & Garfunkel pero pasados por un cierto aire lisérgico que alteran lo meramente folky y uno entonces recuerda los espectaculares arreglos de Randy Newman en el 12 Songs.
 
En fin, que os voy a contar de un disco que tengo por tesoro siempre a reivindicar y que nos habla de la grandeza del grupo inicial de Danny «Champ» Wilson con su querido hermano.
 
Hablamos de Grand Drive, favoritos entre favoritos. Una especie de Kinks del cambio de siglo, en el sentido de que nunca se les reconoció su grandeza pero crearon un set de canciones preciosas, elaboradas, eternas y clásicas instantáneas. 


La vida es muy injusta pero, a veces, la mala suerte hace que las bandas mueran plenas, sin venderse al gran capital y Grand Drive es una de ellas. Impecables, aunque fueran perdiendo algo de fuelle a partir del cuarto disco.

Su mérito: trajeron los aires legendarios del Woodstock donde estaba la casita rosa y un poco del calor de Muscle Shoals directos al Sur del Londres suburbial, adornando todo con su preciosa luz norteña, tamizada por esas eternas nubes que surcan su cielo.
 
No te mueras sin escuchar el Pet Sounds británico del cambio de siglo y colócalo en la balda cerca del aludido de los Mercury Rev que es su hermano mayor americano y también de los que menciono a continuación.


File with: 
Grandaddy’s «The Sophtware Slump»
The Flaming Lips’ «The Soft Bulletin»
Mercury Rev: «Deserter´s Songs»
The Jayhawks: «Smile»

Grand Drive – True Love & High Adventure (2000)

Wheels / A Ladder To The Stars /Sleepy/
The Guy Who Could Carry On/
True Love & High Adventure/
Nobody’s Song In Particular/
A Little Numb/ My Best Side/
One Last Parade


2 comentarios

  1. Mecaguen la leche Joserra, sigo ajeno a este disco, queda como obligatorio para esta navidad, que no decaiga el espíritu de Danny.
    Un abrazo fuerte.

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