Críticas Discos

Después de Forever changes, obra cumbre e intocable del grupo Love en 1967 (reseñado por mi ya aquí), las drogas hicieron sucumbir a toda la banda, (que acabaron aquella joya a duras penas) menos al líder Arthur Lee, pero a pesar de ello, Lee decidió reformar la banda y seguir llevando el nombre de Love, es por esto, que hay gente que considera a este álbum el primer disco solista de Arthur y no un disco de Love, en lo que se puede o no estar conforme, pero bien, por muchas consideraciones yo si lo englobo junto con los tres primeros discos. De hecho esta etapa post-forever changes está injustamente apartada y me parece un error, ya que este por ejemplo me parece que es mejor que Da Capo, y se pega de manera fuerte con el primero homónimo.
Aquí se deja de lado todo lo acústico de sus trabajos anteriores, para adentrarse en un rock muy eléctrico inspirado principalmente en la música de la Jimi Hendrix Experience. No en vano, hablamos de un año muy prolífico por muchas bandas, The Beatles con su joya final Abbey Road, The Rolling Stones y su Let it bleed memorable, The Doors y su gran The Soft Parade, The Who y su epopeya de Tommy, la Creedence Clearwater Revival con Bayou Country y Green River, mucha tela…
Así la formación que da forma al disco es Arthur Lee a la guitarra rítmica, voz, piano, conga y harmónica, Jay Donnellan a la guitarra solista, Fran Fayad al bajo, y la batería para George Suranovich, excepto en tres temas (2-4) que la toca Drachen Theaker. Con esta formación el sonido se hace más duro, más rockero, sin perder el lado pop y con menos vientos y orquestaciones.
Lo que más llama la atención  del disco, son las grandes melodías que Arthur Lee presenta (ninguna canción del disco es desechable) y los diversos estilos que componen el álbum, se pueden escuchar toques folkies y hasta jazzeros a lo largo del mismo, una amalgama riquísima.

 

August comienza el disco, una pieza descomunal desde su atropellado inicio con la guitarra solista y su punteo sideral, hasta que entra la voz de Lee y desarrolla una melodía brutal, para luego en la parte final fluir la psicodelia y donde Jay Donnellan se explaya con su punteo. Your friend and mine-Neil’s song es un tema de folk psicodélico (en onda de los primeros Pink Floyd, pero sin teclados) y country, dedicada al manager de la banda, muerto de sobredosis.  I’m with you es una maravilla beat, tema fantástico, con cambios de ritmo preciosos (uno de los temas donde cambia el batería y se nota) y esa onda jazzísitca. Good times tiene un toque más rythym and blues, en la onda Hendrix que se nota en el gua gua de la guitarra y en la propia manera de cantar de Lee, un tema excepcional con paradas y vueltas. Singing cowboy es el único tema compuesto a pachas por Lee y Donnellan, donde vuelve el batería titular con sus redobles contínuos, que empieza en tono folk-rock para virar a rock furioso con gran trabajo vocal de Lee.
Dream comienza la segunda cara, un baladón de categoría sublime que incluye un precioso sólo de guitarra, pero cuya melodía es soberbia. Robert Montgomery contiene unas líneas de bajo magníficas, mientras la batería y la guitarra vuelan en un tema de psicodelia total. Nothing es otro pedazo de balada, con melodía y armonía preciosas nos traslada a cualquier playa de la California de donde procedían, para en su cambio asaltar el folk psicodélico. Talking in my sleep me parece un portento de canción, desde la voz del inicio de Lee, brutal, pero donde además la banda está gloriosa al más puro estilo Jimi Hendrix Experience, aunque sin olvidar que también hay algo de Cream. Always see your face cierra la maravilla de álbum, un tema sencillamente glorioso donde aparece una trompa fantástica y que en parte nos recuerda a algunos pasajes de Forever changes.
En la edición de que dispongo (gracias a Gonzalo Aróstegui Lasarte, al que dedico esta entrada) hay tres temas adicionales, tres tomas alternativas de los temas Robert Montgomery, Talking in my sleep y Singing cowboy, que aportan meros detalles menores.
Four Sail obviamente no supera a su predecesor, a la maravilla de Forever Changes, pero de todas formas es un gran álbum y es una demostración del talento que Arthur Lee poseía como vocalista y como compositor. Arthur Lee, sacaría después un par de discos más como Love, y algunos como solista, hasta dejar de producir música y concentrarse nada más que a realizar presentaciones en vivo.
 
Este texto fue escrito por mi en mi espacio My Kingdom for a Melody y ha sido adaptado para Exile SH Magazine.

Por Savoy Truffle

Os dejo con el tema August interpretado en vivo en 1970.

Love – Four Sail (1969): 9’8/10
1.August/ 2.Your friend and mine – Neil’s song/ 3.I’m with you/ 4.Good times/ 5.Singing cowboy/ 6.Dream/ 7.Robert Montgomery/ 8.Nothing/ 9.Talking in my sleep/ 10.Always see your face
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4 comentarios

  1. Forever Changes es inabarcable, pero tras éste la gran masterpiece de la banda, porque el disco es de Love y no de Arthur Lee, como digo yo, lo dice la portada.
    Un abrazo.

    1. Addison de Witt: Y tan inabarcable, una de esas joyas de la vida. Si, yo también lo meto dentro de Love, si fuera de 1978, quizás ya sería otra historia, pero recompuso a la banda y es una perla de disco.

      Abrazos truferos.

  2. Gracias de nuevo por la dedicatoria, Savoy. Hay quien pone "Four Sail" a la altura de "Forever Changes" y no va desencaminado. Un disco sensacional que suena tan a Love como los anteriores.

    Abrazos.

    1. Gonzalo Aróstegui Lasarte: De nada hombre, compartimos pasión por Love. Hombre, desde luego si hay un disco que está a la altura de Forever changes es este, otro tema es que los puristas lo dejen fuera de lo que ellos consideran que es Love. A mi me parece sublime.

      Abrazos truferos.

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