Críticas Discos Especiales

Hay algo catedralicio en la aparentemente simple propuesta de Suicide: la repetición mecánica del Krautrock con las partes vocales más salvajes de los viejos roqueros de la Sun pasadas por el sótano urbano y perverso de la república bananera de la Velvet. Pero también hay mucho gospel americano, mucho James Brown y , en definitiva , mucho soul.

Esta semana ha muerto Percy Sledge, uno de los grandes soulmen del mitico sello Atlantic y lo primero que he hecho tras enterarme de la triste noticia, no es acudir para llorarlo a una de sus recopilaciones con el «Cuando un hombre ama a una mujer» sino a uno de los discos debut de la Historia.

El primer trabajo de los amigos Martin Rev (teclados y machines)  y Alan Vega, (voz) editado en el año del punk, es una colección única, un planeta en toda regla, el planeta rojo.

Por los clavos de Cristo el Redentor, esta obra de arte de esta pareja de locos tendría que colocarse en los cajones de gospel, que se lo digan a The The. ¿Por qué?

Porque te deja siempre con ganas de comulgar por los pasillos laterales y porque suenan guitarras ardientes aunque no las tenga.


Cherie Cherie es puro Percy Sledge, un soul épico de reconversión industrial pero sexy as fuck, violento como un tiro en la nuca, despiadado pero tan humano que no esperes que te coagule la sangre sino todo lo contrario, el rojo líquido fluirá por tus venas con la aceleración de un McLaren.

Hay algo catedralicio en la aparentemente simple propuesta de Suicide: la repetición mecánica del Krautrock (influencia de Kraftwerk manifiesta) con las partes vocales más salvajes de los viejos roqueros de la Sun pasadas por el sótano urbano y perverso de la república bananera de la Velvet. Pero también hay mucho gospel americano, mucho James Brown y , en definitiva , mucho soul.

El caso es que cuando escucho sus canciones caen en toda mi alma como salmos hipnóticos y considero a la bicha hermana del Marquee Moon de Television y del Catholic Boy de la Jim Carroll Band y no porque se les parezca, ni un gramo oigan,  aunque sean quintos sino porque se situan dentro de la galaxía punk en un lugar muy apartado del resto de estrellas, sin formar ninguna constelación, a su puta bola, siempre brillando misteriosas.

Sabes que si decides pillar la nave y acudir a su encuentro, te vas a quedar colgado de su atmósfera, totalmente ensimismado en su propio milagro. En eso es como en otras épocas el Astral Weels o el Grace.

En Inglaterra, los Joy Division ya empezaban su guerilla y estaban a punto de liarla con una propuesta semejante a base de sincopa, actitud punk y dureza extrema. Este disco from NYC les marcó a fuego.

Me alucina Girl, por su sexualidad y porque no deja de ser como un rythm and blues de Them reconvertido para el nuevo movimiento underground. Soft Cell son hijos de Suicide.

Es difícil no dejarse seducir por ese cuento del horror que son los diez minutos de bajada al infierno de Frankie Teardrop, ahora que estamos juzgando por aquí al cruel shaolin que despedazó a las jovenes prostitutas, casi como mejor pasarla de largo porque es la perfecta descripción de la locura que produce el tipo de conductas que se salen por la tangente como estrellas fugaces y producen tanto dolor.

Los gritos de Alan no es que se parezcan al mal, es que son la puta locura. Frankie Teardrop es un cuadro de Goya, tenebroso, brutal e insano pero al fin y al cabo reflejo artistico de algo que está ahí, en la condición humana y que como el cuarto donde estaba prohibido entrar de pequeño, fascina.

Uno ve clara la influencia bien reconocida del Bruce Springsteen en la oscuridad del límite de la ciudad de estas creaciones de un planeta único llamado Suicide-Suicide. En Nebraska, el de Nueva Jersey mezcló el folk de Woody Guthrie con el gospel de Suicide y Taxi Driver, intentando dejar explicar a los propios malandros desesperados, en primera persona,  sus razones para cargarse a todo lo que se menea.

Y en la base de todo, como siempre, la injusticia, la desigualdad, la guerra y el Estado protector de lo que no da problemas.Y ahí seguimos…

Ghost Rider la podemos considerar el single porque es la más luminosa del lote y es de la que se han hecho más versiones.Todavía asusta.

Los recuerdos de La Edad de Oro de Paloma Chamorro en TV1 en el pase de Alan Vega y el impacto que me produjo ese tipo gritando, su ropa de cuero samurai y esa entevista esquiva y super violenta, incómoda, sin mirarle a la cara a nuestra entonces moderna oficial, tratando ella de sacarle cosas sobre su obra como escultor-hacía cruces con desechos de la cultura americana-me hicieron entender el disco con el que empezó todo.

«No soy una estrella del rock y no soy un artista» dice al acabar esa imposible charla y es que Vega como De Niro era de la Actor´s Studio, es decir, era el propio malo de sus canciones de r&roll electrónico.

El eco de Elvis mezclado con los singles de la caja del Nuggets en el más puro ejercicio iconoclasta que uno a escuchado de semejante combinación, transita por una espiral boogie titulada Johnny que pone los pelos de punta.


Y en la sublime Keep Your Dreams (después desarrollada en la joya Drean Baby Dream) tenemos la pista de todo el post-punk ochentero  -absolutamente TODO- basado en este gospel del terror que los Suicide inventaron y que, en realidad, está lleno de amor y suplica porque soñemos, porque aguantemos el tirón, porque follemos, porque amemos, porque tratemos de elevarnos antes de que esto se acabe y así , no tiremos todo por la borda.

Ellos eran reales, escuecen, como las historias de sus personajes por eso nunca dejará de atraernos la luz de su estrella, única e irrepetible.

A Punk Gospel American POM.

Percy Sledge, DEP.

Suicide – Suicide (1977)
10-10

Ghost Rider/Rocket U.S.A. /Cheree/Johnny/Girl
Frankie Teardrop/Che /Cheree (Remix)/I Remember
Keep Your Dreams


5 comentarios

  1. Me emocionas, bandido, conservo esta rodaja en vinilo desde hace alrededor de 30 años. Me gusta que cites a The The, a Television, a Jim Carroll, a Joy Division, a Soft Cell (olé tus huevos, sí, son hijos de Suicide). Eso que dices del Nebraska del Boss lo dije yo hace mucho tiempo pero nadie me hizo caso. Es más, te diré que el único disco que me mola realmente de Bruce Springsteen es Nebraska probablemente por ese toque alanveguiano suicida. En "Johnny" están muchas claves, tete, de pseudónimos. Ay Cheree, me pone lo que no está escrito. POM inmensa. Abrazo.

  2. Esperaba esta entrada, Joserra, ya me lo dijiste, y sabía que iba a ser así de emocionante. Rodeados de tanto mediocre y blandengue, hay que recuperar siempre el debut de Suicide, pues es tan bueno como "Fun House" y "Berlin" y muy pocos parecen recordarlo. Doloroso, pero vivo; extraordinario en todo caso. A mí la primera escucha ya me lo anticipó

    Un abrazo.

  3. Menuda entrada, no los conocía, confieso. Me parece que ya pierdo tiempo si no me los agencio en algún formato comestible para un tipo hambriento de música….mientras me conformo escuchando "Put a little Lovin' On Me" del maestro que ya me va poniendo pilas pa' un buen rato. Saludos

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