Críticas Discos

Recuerdo que ya antes de que saliese Le Noise a la venta, algunas voces lo criticaban, supongo que a Tío Neil se la pelaba bastante, pero lo que es mejor, para mi era el punto de partida para prestarle aún más atención. En esta vida, con el paso de los años, te vas dando cuenta, que cuando alguien en cualquier manifestación cultural (música, cine, literatura, arte, etc.,) cambia, gira, o simplemente arriesga, hay sectores que exclusivamente por ese hecho, no le van a pasar ni una, pues es ahí dónde uno se interesa con todavía mayor ardor, si cabe.
Después de unos años, donde el músico canadiense, afincado en Estados Unidos, estaba volviendo a coger un ritmo endiablado de composición, y dónde ya algunos discos empezaban a ser más que importantes, llega esta auténtica joya, un serio aspirante a clásico moderno, y como no, otra obra maestra más en su dilatada carrera. Le Noise se convirtió, por derecho propio, en el regreso a la grandeza absoluta del músico más vigente y genial de su generación.
La idea primigenia de la grabación es sencilla, Neil y su guitarra a pelo, como tantas otras veces, tocando temas desnudos, eso no suponía sorpresa, ya que acompañado de su guitarra acústica lo había hecho casi su modo de vida. La novedad es que en este álbum, la quebradiza y encantadora voz de Young está envuelta en guitarras eléctricas saturadas hasta el extremo, con loops obsesivos que aparecen, desaparecen y una sonoridad tipo cueva, que le da ese ambiente extraordinario a todo el conjunto.
Un dato muy importante acerca del título del disco, lo da el productor Daniel Lanois (es un juego de palabras con su apellido) que es igual o tan importante como Neil en el resultado final, ya que este disco no sólo tiene grandes temas, sino que lo importante es «cómo suena». Es un álbum con multitud de detalles, diría que infinitos.
Walk with me abre el disco, y es una especie de declaración de intenciones para no llevarte a engaño, como un resumen del álbum, con un primer acorde de guitarra contundente y esos loops y sonoridades que van envolviendo y cerrando el tema, se trata a partir de muy poco, crear un mucho con esos ruiditos. Nada de bajos, ni baterías ni perscusiones, música cruda tocada desde las entrañas.
Sign of love tiene ecos de temas antiguos del propio autor (onda Ragged Glory con Crazy Horse) que no rompe para nada la tremenda coherencia del disco, además de oír aquí la voz del genio completamente sincopada y medio ocultada por los poderosos artefactos electrónicos que maneja Lanois. Someone gonna rescue you es quizás el tema más country del álbum, algo a lo que Young nunca podrá renunciar, ya que viene de allí, pero en este caso embutido en el ambiente de este disco, quedando de lujo. Love and war es una obra maestra en si misma, un tema fronterizo que podría servir de banda sonora a cualquier película del oeste de cualquier época, la manera de cantarla pone los bellos de punta, de esos temas que aúnan grandeza y más grandeza. Angry World se emparenta mucho con el segundo corte y va en la senda de los discos con Crazy Horse, siendo además otra pedazo de canción, con esos guitarrazos eléctricos alternados con esos detalles electrónicos gloriosos. Hitchhiker es un tema muy intenso, del Neil más rockero, ese lado grunge explotado en este disco de manera diferente, sólo centrados en su voz, la guitarra ruidosa y esos efectos que acompañan. Peaceful Valley Boulevard es un tema crepuscular, un oasis dentro del disco, un reposo del guerrero, como si en medio del camino recorrido hiciese una parada para coger fuerzas y rematar el trabajo. Rumblin’ cierra el álbum con un comienzo extraño, hasta que aparece la voz de Young que sube los ánimos y nos eleva, esa melódica voz que todo lo puede.
Muchos grupos o artistas creen que la sensación de éxtasis eléctrico se consigue a través del ruido por el ruido y el descontrol, esta es la demostración justo de lo contrario, ya que mediante la combinación perfecta de una o dos pistas de guitarra, los detalles electrónicos comandados por el productor y la voz grabada en directo bajo el atronador sonido de dos viejos amplificadores Fender, se consigue la gloria.
En definitiva Le Noise es un disco extremo, crudo, lleno de mil matices, pero de escucha reposada que te hace levitar en muchos momentos. También admito, que su peculiar enfoque sólo provoca dos cosas, que lo ames o lo odies, yo soy del primer bando.
Os dejo con el vídeo de Angry world.
Por Savoy Truffle
Neil Young – Le Noise: 10/10
1.Walk with me/ 2.Sign of love/ 3.Someone gonna rescue you/ 4.Love and war/ 5.Angry world/ 6.Hitchhiker/ 7.Peaceful Valley Boulevard/ 8.Rumblin’


16 comentarios

    1. Gonzalo Aróstegui Lasarte: Pues ya estás tardando, porque la verdad es que si tu blog se llama Ragged Glory, este disco en el que hay cosas que me recuerdan a aquel, estoy convencido que te gustará.

      Abrazos.

  1. Nunca me ha llegado este disco, lo siento, casi nada que firma Lanois me gusta demasiado (hay excepciones Dylanianas por ejemplo). De todas formas es Neil y de vez en cuando lo recupero.
    Abrzo.

    1. Addison de Witt: Pues para mi la clave, que en este caso es muy positiva, es que como Lanois también es músico, entendió a la perfección lo que quería Tío Neil. Es una obra disruptiva, que abre fronteras y arriesga, un gran disco. Dale oportunidad.

      Abrazos truferos.

  2. Yo soy de tu bando, una POM, cante jondo neil youngero, una gozada de disco, acojona de lo grande que es. Lo defendí en la Land y la mayoría me lapidó. Yo te apoyo hasta en el sobresaliente. Buenisima reseña.Extremo y crudo, nos gusta el tio Neil. En mi opinión su mejor disco de los últimos años y mira que la Píldora es bueno eh!!!! Abrazo y viva tú! El penúltimo párrafo es de pegatina en la cover del disco.

    1. Joserra Rodrigo: Lo de canto jondo es cierto, se me olvidó decirlo… je, je, je. Esa es la cuestión, creo, es un disco tan enorme por todo lo que abarca desde tan poquito, que le hace enorme. Es que, sinceramente, como me gusta ir contracorriente como los salmones, pero en este caso te diría que casi el que más, porque a poco que te metas a fondo en la obra, te das cuenta más tarde o más temprano de sus tropezientos mil detalles y de la grandeza que atesora.
      Por no hablar de los temazos siderales que tiene, algunos de ellos putas obras maestras en si mismos.
      La Píldora psicodélica es el otro gran discarro de Tío Neil en los últimos años, pero es otro cantar, ya que es con los Crazy Horse.
      Gracias y por lo menos no estoy sólo en la cruzada por defender Le Noise.

      Abrazos truferos.

  3. Nunca conecté con este disco, seguramente sea un error pero no me veo intentándolo de nuevo. soy más de praderas, de granjas, de esta noche es la noche y de la fiebre del oro. Ya sabes. Abrazos Mr. truffle.

    1. Nikochan: Te aseguro que es un error, un gran error. La grandeza de Tío Neil es que saliendo de praderas, granjas y demás va más allá y explora y arriesga, y por eso es el más grande. Este disco es una joya absoluta, parece mentira que tu, precisamente tu, no lo veas…

      Abrazos truferos.

    2. Si lo sé que es un error pero lo escuché y lo dejé pues no le encontré el punto. Tito Neil es muy grande pero a veces se hace pajas mentales y este creo es un caso aunque tampoco te haré la contraría por no haberlo escuchado a fondo.

    3. Nikochan: No, no… no seas como los tíos de las discográficas… tu vales, tu puedes… sé fuerte Niko (como le dijo Rajoy a Bárcenas) y lo conseguirás…
      No son pajas mentales, son molinos de viento Sancho…

      Abrazos truferos.

  4. Me gusta eso de cante jondo neilyoungero …. a mi si me gusta aunque menos con el tiempo. AHora lo veo mas como un experimento. Ecos ya habia en Trans o en Life y no se puede decir que sean sus discos mas redondos. En cualquier caso aplaudo el riesgo y el tratar de hacer algo diferente. No un 10 para mi, pero si un 8. Saludos,

    1. J Aybar: Es que es cierto, hay mucho cante jondo al estilo Neil Young claro está, en este disco. Pues a mi con el tiempo me gusta más si cabe, de hecho lo sigo viendo como una joya atemporal, es de esos discos que en cada escucha descubres algo nuevo. Eso si, reconozco que eres de los pocos casos que ni se vuelve loco ni lo odia.

      Saludos truferos.

  5. En mi caso alego ignorancia. No sin cierto sonrojo (habida cuenta el protagonista) y tras tan cojonudo texto me pongo al tema… Además, por lo descrito y con lo que me gustan los discursos así desgarrados, sin maquillar y en pelotas, el pecado parece ya de arresto domiciliario… Ya me aplico Mr. Truffle, no se dude. Y guzzero abrazo.

    1. Guzz: Compañero esa ignorancia ha de ser corregida cuanto antes, por lo menos para que expreses tu opinión. Bueno el discurso lo provoca el disco en si, porque hay que tener los huevos muy gordos para hacer un disco con esta idea, sólo guitarra, mi voz y un productor con sonidos electrónicos y parir esta maravilla, pero claro, hablamos del más grande y con él todo es posible.
      Al toro, y ya me contarás.

      Abrazos truferos.

  6. Para mi es más de 8,5, nota alta sin duda alguna, el mejor Neil Young de los últimos tiempos al menos para mi. Arriesgado y con el Young de siempre detrás, el texto chapeau, hay aquí frases para enmarcar. Saludos

    1. Chals Roig: Bueno, ya sabes que las apreciaciones personales difieren a veces hasta en punto y medio, a mi me llega mucho éste álbum.
      Muchas gracias.

      Saludos truferos.

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