Críticas Discos

En 2008 sin hacer prácticamente ruido apareció de la nada una banda de Seattle con un estupendísimo disco bajo el brazo que contenía algunas de las melodías más bellas que se han podido escuchar en este inicio de siglo. Recuerdo descubrirlos gracias a un estribillo maravilloso, circular y altamente adictivo: ”I was following the, I was following the, I was following….”. Oh! Qué locura, qué maravilla de canción y qué videoclip eterno! Lujazo! Pronto me hize con su álbum debut “Fleet Foxes”. Claramente el disco me enamoró y me encandiló pero para seros sincero el disco de entrada resultaba algo tímido mejorando claramente con cada escucha. Pasado mucho tiempo desde entonces, lo sigo escuchando de tanto en cuanto, y es justo ahora cuando me parece mejor que antes pues no sólo de “White Winter Hymnal” vivían lo gañanes, allí lucen extraordinariamente obras eternas como “Ragged Wood”, “Quite Houses” o “Your Protector” por citar tres de mis favoritas. Los Fleet Foxes no inventaban nada, extraña que un grupo de Seattle haga ese tipo de música más cercana por decir algo o casi mimética a la de uno de mis grupos preferidos de todos los tiempos, hablo por supuesto de CSNY, tanto juntos como por separado, aquellos pájaros aún hoy son insuperables pero mira tú por donde estos zorritos demostraron que habían aprendido muy bien la lección y que más o menos la sabían poner al día. El disco fue un éxito rotundo de ventas y de crítica, algunos de sus componentes antes de sacar el difícil segundo disco editaron sus cosicas por separado pero el segundo álbum se iba cocinando lentamente, demasiado lento creo yo pero claro, las expectativas eran tan altas, la presión era tan grande que fácilmente acabarían decepcionándonos. Casi tres años después apareció “Helplessness Blues” y sólo puedo deciros que lejos de decepcionar resultó ser una maravilla, gloria bendita…

Fleet Foxes es sin duda el grupo de Robin Pecknold, es el autor de las canciones, el cantante y guitarrista, su portavoz y cabeza parlante y pensante. Pecknold formó el grupo junto al guitarrista Skyler Skjelset, ambos forman el núcleo duro, el resto podrían y han ido cambiando con los años. Lo más destable fue la entrada y la salida de Jonathan Tillman, batería de voz prodigiosa que al finalizar la gira del disco que nos ocupa abandonó el barco para seguir con su carrera en solitario bajo el nombre de Father John Misty aunque también ha editado discos bajo su propio nombre. Las influencias del grupo están ahí, no hay duda: CSNY, Fairport Convention, Simon and Garfunkel, Beach Boys, Roy Harper e incluso Van Morrison. No son malos palos donde amarrarse la verdad. Y Pecknold y compañía cogen todo eso, lo pasan por el túrmix, lo presentan bonito, melancólico, con dosis de nostalgia y nos atrapan para siempre. Esa es la verdad.

“Montezuma” abre el telón. La voz suena perfecta, preciosa, angelical. Las armonías y los coros me seducen sin compasión. Es sin duda una pieza perfecta para abrir el álbum, simplemente maravillosa. Luego una guitarrita juguetona nos presenta “Bedouin dress”, entra la batería y de nuevo, como no, esa magnífica voz de Pecknold pero esta vez es un violín quién se lleva el protagonismo vistiendo de gala la tonadilla, y la instrumentación se va haciendo cada vez más importante y los coros acaban por arropar la canción y qué canción!. “Sim sala bim” no le va a la zaga, nos mete de lleno en una atmósfera de finales de los sesenta principios de los setenta donde nos parece escuchar por un momento a los CSN, qué puta maravilla, qué guitarra, qué final, eres tú Stills? Has vuelto por tus fueros? Ooooh qué maravilla! Ojito, qué llega “Battery Kinze” una de mis favoritas, que representa en esencia lo que son estos Fleet Foxes, nada nuevo pero con una calidad descomunal. Hasta el momento creo que superan con creces su anterior trabajo pero es que el disco sólo hace que crecer y crecer, es con “The plains/bitter dancer” que se me caen las bragas al suelo. Descomunal. Simplemente perfecta. Los coros angelicales que abren paso a una enorme canción que firmaría el mismísimo Crosby no tienen desperdicio, y esa flautita, qué me decís de esa flautita irresistible? Y de ese final para cantar a tutiplén en el concierto, en el bar, donde sea a pleno pulmón, a pechopalomo, joder, me pone los pelos de punta.

A todo esto llega el single del disco, el que le da nombre, llega “Helplessness blues” con esa melodía que es imposible sacarte de la cabeza, una canción de tomo y lomo, qué fue máxima candidata a canción del año junto a “Your fake name is good enough for me” de Sam Beam para este humilde servidor, otro que no se queda precisamente manco. El disco me tiene enamoradísimo y con la instrumental “The cascades” me meo toa, me sorprendo a mi mismo con los bellos de punta, emocionadísimo…, pensaba que tardaría años en volver a tener esa sensación escuchando una pieza instrumental. Y para colmo aún falta bastante disco, sin ir más lejos “Lorelei” es de mis preferidas, una joya, un diamante por descubrir. Qué melodía, qué coros, que savoir faire… Estupenda canción que sólo hace que confirmar que estamos ante un discazo insaltable que comienza a enseñarnos el final del camino con “Someone you’re admire” que tiene un algo, un no sé qué de Simon and Garfunkel que me engatusa sin más antes de darnos una gran canción de ocho minutos con múltiples cambios de ritmo y secciones musicales que quitan el hipo, “The shrine/An argument” es estupenda de principio a fin, y Pecknold demuestra, si es que hiciese falta, one more time, que tiene una voz prodigiosa. Puro sonido folk de los setenta. “Blue stopped tail” y “Grown ocean” cierran el disco de forma inmejorable. Los Fleet Foxes han pasado sin ningún sobresalto ni apuro el difícil segundo disco, se han superado a si mismos firmando su mejor álbum, el mejor álbum posible, uno de los discos más interesantes de aquel año sin lugar a dudas, para cuando una digna continuación?

Fleet Foxes – “Helplessness Blues” (2011)
8,4/10
01.- Montezuma/ 02.- Bedouin Dress/ 03.- Sim Sala Bim/ 04.- Battery Kinzie/ 05.- The Plains Bitter Dancer/ 06.- Helplessness Blues/ 07.- The Cascades/ 08.- Lorelai/ 09.- Someone You’d Admire/ 10.- The Shrine An Argument/ 11.- Blue Spotted Tail/ 12.- Grown Ocean.


7 comentarios

  1. Creo que de todo lo bueno que me has "pasado" o dado a conocer orientado al chamber-folk en los últimos años el primero de estos y el de los arbolitos de Bon Iver (que los cabritos del allmusic puntúan con dos stars) habitan varios pisos por encima del resto… Nunca me detuve en el segundo de estos sorros (supongo me coincidiría con otra cosa a la que dí prioridad) y pareciera que me estoy perdiendo algo fino fino… Ya conoces el protocolo habitual en estos casos y no media más explicación Archienemy.

  2. A mi este primer disco me gusta, de los Fleet Floxes, aunque siempre me han parecido algo demasiado flokies y pasteletes, en ese sentido Band of Horses me gustan más y aportan, bajo mi punto de vista más cosas, pero si, este primer disco está bastante bien, de hecho lo tengo original y todo.

    Abrazos truferos.

  3. Al hilo de lo que te comentan los dos kamaradas sobre esta gran entrada, decir varias cosas.
    Estos tipos sacaron el primero, este es el segundo Savoy, y fue una maravilla de disco. Este segundo tiene canciones muy muy buenas, algunas mejroes que las del primero homónimo pero en general, el primero es más brillante.
    También como Truffle me parece que Band of Horses son muchos más rockers y molan más. estos son demasiado pastorcillos, recuerdas aquella polémica tras su concierto que me pareció todo como demasiado perfecto y me embajonó????? Lo cierto es que My Morning Jacket inventaron esta pólvora y todos a copycatear. Pero bueno es muy buen disco, no vengo aqui para criticar que no sea cierto lo que dices.
    Sin embargo, el Don Guzz lleva la razón en dar en la clave de dos de los discos esenciales del movimiento: el priemro de estos y el segundo de Bob Iver ( jajajajaj, la valoración del allmusic, una mierda , si lo ven en directo presentar le ponen 6) , al que habría que añadir una POM como el Van Occuphanter de los Midlake y cualquiera de los primeros de My Morning Jacket. Ahí está la nitty gritty del "a belén pastores" Un abrazo y ole por exiliar a los zorros.

  4. El de Bon Iver es la releche, de eso no hay duda. Una POM moderna. Pero aunque los Band of Horses me gustan, tampoco creoq ue sean mejor que Fleet Foxes, por ahí van los tiros, son muy parecidos, estos no rockean pero folkean muchísimo más y mejor. Es un muy buen disco. Sus dos discos son notables y con eso nos quedamos. Cosa bonica.

  5. A mi este disco me dejó un tanto frío , el primero me gustó mucho más. Pero eso no quita que sin el factor "novedad" por delante haya mejorado y el tiempo le favorezca. Si es verdad que de los pastorales los Foxes han sido de los mejores, esperemos que tenga continuación, las harmonías vocales que teje Pecknold son "bonicas del to", quizás la gente esperaba tanto de este disco que se le quedó pequeño. Tiene eso si unas cuantas canciones de sobresaliente. Ahora si, y mejor, Saludos my king

  6. El primero fue una sorporesa, este a mi no me llego, esperaba mas, luego en directo no me gustaron,muy intensos y pretenciosos, recupere este disco tras el bolo y me gusto mas, pero sigo quedandome con el primero. Band of Horses son mas cañeros pero en vivo también me decepcionaron bastante.
    Abrazos repartidos.

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